El Spar Girona ya está en los octavos de final de la Eurocup (donde se enfrentará al Pecs húngaro, con quien también coincidió en la fase de grupos) tras zamparse el Campobasso en Fontajau (82-71) en un partido (y una eliminatoria) que ha quedado resuelta en el descanso (49-32). No habría demasiados planes mejores, esta noche, en Girona, para salir de casa, que ir a disfrutar de una noche de baloncesto europeo de aquellas que hacen afición. Ir a ver a Uni vuelve a ser agradecido y divertido, con un baloncesto eléctrico que merece seguir ganando adeptos cada semana más allá de unos resultados hasta ahora espectaculares. Como decía un día de estos Roberto Íñiguez, esto cada vez pinta de ser más adictivo y no depende de una sola jugadora. Cuando hay que jugar fuerte dentro aparece Pierre Louis, cuando se necesita más polivalencia emerge Guerrero, Canella está en todas partes, Ygueravide sonríe mucho más que el curso pasado y la batería exterior es una amenaza constante con Touré, Hristova, Bibby... qué suerte que el domingo vuelva a haber partido en Fontajau (contra el Estudiantes, en liga), para seguir disfrutando de todo esto.
Uni ha vuelto a hacer magia. Nada por ahí, nada por allá, y en diez minutos pasamos del 1-11 con el que había empezado el partido, y que obligaba a Íñiguez a pedir tiempo muerto con sólo tres minutos disputados, al 30-15 de los primeros momentos del segundo cuarto . Un 29-4 de parcial como una casa de payés que encauzaba de la mejor manera una eliminatoria que había salido de Italia con dos puntos de margen para las gerundenses. Cuando Uni ha corregido la defensa, algo los problemas en el rebote defensivo, ha podido correr, a lo que ha sumado el acierto en el triple, ha vuelto a ser imparable. Ha empezado a disparar Ygueravide con dos aciertos seguidos desde más allá de 6,75 en el primer cuarto para dar la primera ventaja al Spar, y nada más arrancar el segundo se han añadido Guerrero (2), Touré, Canella y Hristova. En la primera parte las gerundenses llegaron a tener 18 puntos de ventaja (39-21) tras un baloncesto de Pierre Louis, que lo hizo casi todo bien, también minimizar la temible Pallas Kunaiyi. Chapó por la decisión de hacerla entrar por Caldwell en esta eliminatoria.
Se trataba de administrar la ventaja y los tempos y, en este tipo de escenarios, Uni también si sabe mover con delicadeza. A cinco minutos para terminar el tercer cuarto las gerundenses ganaban de 11 (52-41) e Íñiguez ha decidido detener el partido con un tiempo muerto. Aceite en una luz porque cuatro puntos seguidos de Pierre Louis y otros cinco de Touré han dado la máxima ventaja al Uni, +20 (61-41) y aquí no ha pasado nada. Porque al Uni le salía todo, incluso el triple inverosímil de Canella sobre la bocina que cerraba el tercer parcial de la mejor manera (69-51). La cosa no ha tenido demasiada más historia. Íñiguez pudo repartir minutos y dosificar esfuerzos sin problemas y Uni acabó ganando de once (82-71), que era de lo que se trataba, y todo ello sin Jakubcova, que ya fue baja en Valencia por un proceso vírico , y en la noche en que Chloe Bibby ("sólo" 12 puntos, 5 en el último cuarto) ha pasado más inadvertida que de costumbre.
Jordi Roura
diaridegirona.cat/G.T.