Un fatal parcial de 18-0 en el primer cuarto apaga cualquier esperanza por dar la sorpresa en Turquía en un encuentro en el que, sin embargo, mantuvo el tipo el equipo aragonés y que deja varias conclusiones positivas para Carlos Cantero
Necesitaba un milagro en Estambul el Casademont para vencer al Fenerbahce y desde el primer momento se demostró que era una misión imposible. Dos minutos duró la ilusión del equipo aragonés por dar la campanada, pero un parcial de 18-0 en el primer cuarto mató demasiado un partido (84-64) en el que, sin embargo, las chicas de Cantero dieron la cara y del que el técnico pudo, dentro de lo que cabe, extraer algunas conclusiones positivas.
Si la tarea ya era extremadamente complicada, que el Casademont se plantara en Turquía con las bajas de Flores y Atkinson y con una rotación de tan solo diez jugadoras no iba a facilitar las cosas. En un visto y no visto, las locales se pusieron 5-0 y amenazaban desde el minuto uno con escaparse en el marcador. Sin embargo, un 2+1 de Markeisha Gatling y una canasta de Helena Pueyo, las dos mejores, consiguieron establecer el empate provisional.
Hasta ahí duró la emoción. El Casademont, que nunca consiguió ponerse por delante, sufrió un apagón ofensivo que prácticamente duró todo el primer cuarto y que con ese parcial de 18-0 dejó el resto del partido prácticamente en un anécdota en cuanto al resultado se refiere. Sumado a la nula eficacia en ataque de las de Cantero, que volvió a tardar en pedir el primer tiempo muerto, el festival anotador del Fenerbache hizo el resto. Porque a las turcas el calificativo de equipo todopoderoso se le queda muy corto. Meesseman, imperial durante todo el duelo, Williams y Allemand volvieron loco a un Casademont en el que Pueyo, al menos, dejó la mejor canasta de los primeros diez minutos con un triplazo sobre la bocina para poner el 23-9 con el que acabó el parcial.
La rabia con la que celebró esa acción la joven promesa española espoleó al resto de sus compañeras, que desde entonces se creyeron que podían competir de tú a tú ante el inmenso potencial turco. Se soltó la melena el Casademont y, de la mano de una poderosa Gatling llegó incluso a rebajar la diferencia por debajo de los nueve puntos (29-20). ¿Había partido en Estambul? Viendo que las aragonesas se le estaban subiendo a las barbas, o al menos amagando con ello, el Fenerbahce se apresuró a responder a esa pregunta. No, no iba a conceder opciones.
Gran mejora en ataque
Tomó el mando del partido Meesseman en lo que fue un clinic de baloncesto de la belga y la renta de su equipo volvió a elevarse por encima de los 15 puntos. Las de Cantero habían mejorado mucho sus prestaciones en ataque, con una Mariona Ortiz a la que se le caían las asistencias, pero no encontraban la manera de contener a las turcas en defensa, principalmente porque son muy buenas. Al descanso se llegó con un marcador de 48-32 tras dos buenas acciones consecutivas de Mistinova.
Comenzó Fenerbahce fuerte el tercer cuarto con la intención de que el Casademont no se viniera todavía más arriba y encontrara una rendija por donde colarse. Llegó la diferencia hasta los 22 puntos, pero una incansable Helena Pueyo, en los dos lados de la pista, estaba empeñada en que el Casademont siguiera peleando. Mawuli, Mistinova y Hermosa siguieron a rajatabla las órdenes de su compañera y la renta disminuyó hasta los 14 puntos cuando tan solo quedaban diez minutos por jugarse.
Volvió entonces las turcas a enchufarse en un duelo en el que, todo hay que decirlo, supieron cuándo apretar y cuándo dosificarse para no pasar demasiados apuros y garantizarse la victoria. Mariona siguió repartiendo su magia en unos minutos en los que la intensidad fue decayendo hasta que un triple de Czukor cerró un partido en el que el Casademont, con Pueyo, Gatling y Ortiz a los mandos, compitió bien ante el Fenerbahce durante tres cuartos, pero en el que en ningún momento tuvo opciones de soñar con una proeza que quedó descartada tras un fatal primer cuarto que apagó cualquier tipo de esperanza.
FENERBAHCE: Allemand (9), Atkins (10), Gaby Williams (14), Meesseman (22), Tina Charles (4) -cinco inicial- Uzun (5), Cakir (5), Lekovic (-), Onar (7), Milic (2), Senyurek (-) y Badiane (6).
CASADEMONT ZARAGOZA: Mariona Ortiz (2), Pueyo (16), Mawuli (5), Nystrom (-), Gatling (15) -cinco inicial- Brcaninovic (4), Hermosa (6), Mistinova (9) y Czukor (7).
PARCIALES POR CUARTOS: 23-9, 25-23, 23-23 y 13-9.
Arturo Pola
elperiodicodearagon.com
foto FIBA