La pívot americana, presentada junto a Bojan Dubljevic, desvela que tuvo ofertas de China y Turquía, pero su único deseo era regresar a la que considera su segunda casa.
Aunque ya ha disputado dos partidos oficiales y es su tercera etapa en el club, Keisha Gatling fue presentada este miércoles como nueva jugadora del Casademont Zaragoza. La imponente pívot vivió una puesta de largo acorde a lo que es, la gran estrella de la plantilla de Carlos Cantero. Junto a ella, estuvo el otro gran referente del equipo masculino, el balcánico Bojan Dubljevic.
“Zaragoza es mi segunda casa, estoy muy feliz de estar de vuelta”, aseguró Gatling, que en su primera respuesta ante los medios de comunicación ya dejó claro qué ronda por su cabeza desde hace varias semanas. “La Copa de la Reina vuelve a ser en Zaragoza, ojalá podamos volver a ganarla. Deseamos jugar finales y estar en el ‘top’ de la Liga Femenina Endesa”, anheló la americana.
Gatling, que vive su tercera etapa en el club aragonés, subrayó la importancia de que varias jugadoras “lleven muchos años juntas”. “La conexión que hay en el vestuario es muy buena. Carlos (Cantero) nos pide intensidad, que corramos con la pelota. A mí, particularmente, que sea fuerte bajo el aro y en el rebote”, desveló.
En clave Euroliga, la pívot reconoció la enorme dificultad que entraña el grupo C del torneo, donde ha sido enmarcado el Casademont tras superar al Constanta rumano en la fase previa. “Acabo de ver los rivales y serán muy duros, pero creo que tenemos potencial para superar el grupo”, aseguró Gatling, que tuvo también palabras de cariño para la joven Helena Pueyo, la gran revelación en estas primeras semanas de temporada.
Como también hizo Dubljevic, la interior incidió en su predisposición para ayudar a jugadoras como la mallorquina o su compañera de posición, Nerea Hermosa. “Sé lo que es jugar contra las mejores jugadoras, tengo experiencia y estoy lista para competir nuevamente en la Euroliga. Hace un año no hubiera dicho que iba a volver a jugar a baloncesto, tuve ofertas de China y de Turquía, pero sabía que si volvía era para jugar en el Casademont Zaragoza”, aseveró.
Sobre la inminente Supercopa de Murcia, que se disputa este fin de semana en Alcantarilla, Gatling señaló que el deseo del vestuario es “demostrar que Zaragoza sigue ahí, pese a haber perdido a dos jugadoras fundamentales (Fiebich y Vega Gimeno)”.
Javier Oliván
foto: Guillermo Mestre
heraldo.es