La canterana taronja, cedida al Lointek Gernika, habla de su pasado y futuro en un Valencia Basket al que ve favorito a todos los títulos

 

Empieza una etapa nueva en un nuevo club y ciudad. ¿Cómo le va la adaptación?

Es un poco difícil porque cambio una ciudad tan grande por un lugar más pequeño y acogedor, pero también es fácil adaptarse, somos muy jóvenes, nos entendemos muy bien y es como una pequeña familia. Lo único que llevo un poco mal es el frío pero iré acostumbrándome poco a poco.

¿Ayuda estar con Buenavida?

Muchísimo. Cuando me enteré fue una gran alegría. Yo no sabía que iba a fichar por el Gernika, fue todo muy rápido y esto nos daba también la opción de vivir juntas, que ayuda mucho a adaptarnos tan fácil. Tener una persona que conoces en el equipo y que además es tu amiga ayuda muchísimo, es un amor de persona, la conozco desde hace dos años y es que como si la conociese de toda la vida.

Recuerda mucho esta cesión a la que tuvo Raquel con el Araski. ¿Es un buen ejemplo a seguir para crecer y volver con un nuevo rol y más experiencia al Valencia Basket?

Sí, Raquel es más que un referente para mí, toda su carrera deportiva es un ejemplo, lo que quiere seguir cualquier niña desde pequeña. Con 22 años ha cumplido casi todo lo que todo el mundo quiere cumplir y me gustaría seguir sus pasos.

¿Cómo tomaron la decisión de ir al Lointek Gernika?

Casi todo el mundo en el club y yo también estábamos de acuerdo en que tenía que salir para poder tener más minutos y crecer, sabía que tenía que salir para mejorar como jugadora y para poder seguir estando en el Valencia BC, que es el club en el que me gustaría seguir en un futuro, con más experiencia. Me senté un día, pensé que era la decisión que mejor me venía, lo comenté, el Gernika se interesó en mí, lo hablaron con el club, que entre ambos tienen cierta confianza y el Valencia BC sabía que era un lugar en el que podía crecer, ser una jugadora importante y tener minutos. Espero cumplir esos objetivos.

 

Estados Unidos, a la espera


¿Costó mucho decirle no a la tentación de Estados Unidos?

Sí, costó bastante por el hecho de no saber realmente aún lo que quieres, dices que no sin saber mucho y arriesgándote un poco a lo que será el futuro. Dices que no a una cosa que no has probado, pero creo que he tomado la decisión correcta y estoy contenta.

No está mal acabar de formarse en la mejor Liga de Europa…

Sí, es la mejor de Europa, hay equipos que compiten hasta el final, no hay ningún equipo al que sepas que le vas a ganar de 20 seguro porque hay mucho nivel. Quería seguir formándome y crecer como persona y jugadora. Y dónde mejor que en España?

El sueño de la WNBA sigue ahí de todas formas?

Sí, es algo para el futuro, pero no lo tengo ahora mismo en mente. Si pasa, pasará. Queda esa espinita, pero en un futuro puede ser.

 

El Valencia Basket es su club


De momento tiene contrato hasta 2029, entiendo que con una serie de cláusulas particulares, pero parece seguro que le quedan aún muchos años por jugar en el Valencia BC…

Sí, ojalá, es una decisión que iremos tomando tanto el club como yo, ojalá este año me vaya la experiencia fuera muy bien y veremos, pero de momento he de centrarme en mejorar este año para poder seguir muchos más en València porque el Valencia Basket lo siento como mi casa, es un club espectacular y tiene un equipo en el que me he sentido genial.

Si echa la vista atrás, ha ido todo muy rápido desde que llegó al Valencia Basket con 13 años. ¿Imaginaba todo lo que le iba a pasar en apenas cinco años?

Ahora mismo miro hacia atrás y es que hay tantas cosas que me han pasado, que de algunas casi ni me acuerdo, pasa todo tan rápido, tantas compañeras, tantos equipos y entrenamientos, muchas cosas divertidas… Nunca podía pensar con 13 años, saliendo de un lugar como Santa Pola, que podría llegar a estar en un club como el Valencia Basket, con esa gestión, con L’Alqueria del Basket, compartir minutos con jugadoras como las que están ahora mismo en la selección absoluta.

¿Cómo se tomó aquella decisión de cambiar de club y de vida apostando por el Valencia Basket tan joven?

Fue fácil porque hicieron que fuera así, mi familia siempre me ha apoyado en el tema del baloncesto aunque tuviera que estar lejos de casa. El Valencia Basket me ofrecía esto y lo otro y dijimos, vamos a probar. No se le puede decir que no al Valencia Basket, a estar en L’Alqueria, era algo muy nuevo, quería probar y ver cómo me iba. Aún no sabía al 100% si el baloncesto era a lo que quería dedicarme y poco a poco me fui dando cuenta que sí, que quería ser jugadora de baloncesto.

¿Nunca tuvo tentación por algún otro deporte?

Desde pequeña siempre estaba metida en Multideporte, en el colegio practicaba un poco todos los deportes. Me gustaban mucho el voleibol y el balonmano y llegué a tener dudas entre voleibol y baloncesto, pero al final me decidí por el baloncesto, también por mis hermanos, los que más me liaron.

Habitualmente ha competido con gente por encima de su edad, pero al mismo tiempo, nunca ha querido dejar de jugar con sus amigas y compañeras de generación, aunque ello multiplicara su agenda de concentraciones, entrenamientos y torneos…

Así es, para mí era lo principal, yo podía estar entrenando con el Nacional o con el Júnior, pero si yo era Cadete, quería compartir esos momentos con el resto de Cadetes, con sus entrenadores y mis amigas. Era mi equipo, me sentía bien con ellas, disfrutaba mucho de lo que me gustaba. Entonces, me daba igual subir de Liga, mejorar y entrenar con jugadoras mejores porque yo quería estar donde estaban mis amigas.

 

Presencia en diferentes competiciones y categorías


El año pasado llegó a jugar con el Júnior en Campeonatos de España, con La Cordà de Paterna, con el primer equipo del Valencia BC y con selecciones de hasta tres categorías, incluyendo la Absoluta. ¿Le cuesta adaptarse a tanto cambio?

Es complicado jugar tanto, hay que tener la cabeza un poco amueblada y ser consciente de los diferentes roles que tienes en cada equipo, pero también es algo que yo pido. Insisto mucho porque quiero estar en la final de la Liga 1 pero también en el Challenge, donde me siento importante, juego con mis amigas y voy a pasármelo bien. Si eres consciente de ello y lo manejas bien no hay problema. Obviamente hay un poco de cansancio, pero también te van dando descansos. Y como es algo que quiero, que realmente pido e insisto, estoy muy tranquila y lo disfruto.

Y el poco tiempo libre que le queda, ¿en qué le gusta gastarlo?

Me gusta mucho pasar tiempo con mis amigas, quedar con ellas, irnos a un bar a tomar algo, reírnos. Es lo que más me gusta porque son los momentos con los que realmente te quedas. Es algo que echo un poco de menos ahora al no estar en València, hacer la típica de comer y quedarnos charlando hasta las tantas.

 

A la Fonteta como visitante

Este año es el último el Valencia Basket en La Fonteta y lo va a vivir como jugadora visitante. ¿Se imagina cómo será ese momento?

Ya lo voy pensando sí, sobre todo por mis padres también. Mi madre me dice que tiene ganas de que llegue ese partido, va a ser un partido muy emotivo, no sé si lloraré o no pero se me hará raro porque al final estoy acostumbrada a ir a La Fonteta y que me animen y ahora verme allí con la camiseta granate y blanca será distinto y raro, aunque estoy muy contenta con la decisión de salir cedida al Gernika. Será un momento intenso, raro, difícil, pero al mismo tiempo, tengo muchísimas ganas de volver a estar ahí.

Donde ya podrá volver a jugar de taronja es en el Roig Arena. ¿Le ilusiona formar parte de ese Valencia Basket que lo estrene el próximo año?

La verdad es que el pabellón va a ser una locura. Recuerdo cuando empezó a construirse y verlo ahora, cuando ya se ve más o menos cómo va a ser, es ilusionante. Ojalá poder estrenarlo allí, aunque nunca se sabe lo que puede pasar, siendo jugadora del Valencia Basket, pero yo creo que es algo por lo que toda persona lucharía para poder llegar a jugar ahí. Será un pabellón espectacular, están apostando mucho por el baloncesto.

El Valencia BC defiende el triplete nacional. ¿Vuelve a ser favorito a ganarlo todo?

Creo que sí, han montado un equipo espectacular, pero ya no solo es el equipo, sino el carácter que hay ya interiorizado en el Valencia BC. Desde pequeñas, cuando estás en la cantera, ya sabes que hay que competir, esforzarse en el día a día, tener dedicación. Para todo el mundo el Valencia Basket es el favorito, pero todo puede pasar. Hay muchos partidos, mucha Liga y también tienen doble competición y es muy difícil llevar eso, pero son favoritas sin duda.

Jorge Valero
superdeporte.com