La alero del equipo aragonés, lesionada de gravedad el 16 de noviembre del 2023, encara ya la recta final de su recuperación. "Antes de que acabe el año, espero estar de vuelta", afirma.

 

Helena Oma se lesionó el 16 de noviembre de 2023. Han pasado ya más de 300 días desde que se confirmó la rotura de ligamento cruzado con afectación de menisco de la rodilla derecha. ¿Cómo se encuentra?
Estoy bien, con ganas de volver a sentirme jugadora. Soy consciente de que todavía me queda un poco, pero tengo muy claro que empezaré cuando mi cuerpo me diga que está preparado.

Todo el mundo se pregunta cuándo volveremos a verle sonreír en la pista del Príncipe Felipe.
Es la gran pregunta. Queda menos, pero es una lesión que es mejor alargar la recuperación que precipitarte. Me queda ese tramo de sentirme segura en la pista. Voy mejorando semana a semana, que es lo más importante. Antes de que acabe el año espero volver a jugar.

Prefiere no fijarse una fecha de regreso.
Eso es. Desde la lesión, las cosas fueron como fueron. Tuvimos complicaciones, se tuvieron que alargar los plazos… Son muchos factores, también el aspecto mental de volver a la pista. Conviene no marcarte una fecha porque nunca sabes cómo va a ir.

 

"Los primeros meses fueron muy duros, me tuvieron que volver a operar para limpiar la zona"


¿En qué fase está, qué puede hacer y qué no?
Son muchas horas de gimnasio. Estoy trabajando todos los días con Álex, el preparador físico, y Alicia, la fisio. Con el equipo hago tiro, estoy corriendo, pero todavía nada con contacto. Espero dentro de un mes poder hacer. Con el balón, sí estoy recuperando sensaciones.

¿Qué ha sido lo más duro en estos casi 11 meses?
Las primeras semanas, porque no conseguimos tener toda la movilidad. La lesión afectaba también al menisco y eso, quieras o no, complica más las cosas. Los primeros meses fueron muy duros, me tuvieron que volver a intervenir para limpiar la zona. Eso fue lo más complicado. La cabeza te da muchas vueltas, tienes muchos sentimientos, pero eso ya ha quedado atrás.

Pese a estar fuera de la competición, la afición ha seguido a su lado.
Ha sido una locura todo el cariño que he recibido. Me encontraba aficionados en la piscina o el gimnasio y me preguntaban cómo iba. Incluso en esos lugares he hecho algún amigo. La gente tiene ganas de que vuelva y yo estoy muy agradecida.

De momento, el que ha vuelto a la Euroliga es el Casademont Zaragoza.
Era nuestra primera final de la temporada, es un premio muy grande competir en la Euroliga. Jugar la vuelta en casa, con nuestra afición, era también un reto muy bonito. Con la vuelta de Vega, fue un día muy chulo.

Este fin de semana disputan la Supercopa femenina Endesa. ¿En qué punto llegan?
Es cierto que todavía seguimos en construcción, pero tenemos mucho potencial y margen de mejora. Las jugadoras que nos mantenemos de otras temporadas estamos ayudando a las nuevas incorporaciones a que se encuentren a gusto. Sobre todo, es un Casademont muy polivalente. Carlos (Cantero) se está enfadando menos y eso es buena señal (sonríe). En la Supercopa vamos a por todas.

Son siete caras nuevas en una plantilla de 12. La renovación es significativa.
La base es la continuidad del año pasado. Es importante que haya jugadoras que conocen la Liga Femenina Endesa, la filosofía de Carlos… adaptarte a un club nuevo no siempre es sencillo. Estoy muy contenta con las nuevas incorporaciones.

¿A usted quién es la que más le ha sorprendido?
Somos un equipo con jugadoras que pueden competir en varias posiciones. Hacer diferentes quintetos nos va a ayudar mucho. Helena Pueyo me está sorprendiendo mucho. Viene de jugar en la universidad y lo está haciendo muy bien. Además, como persona es un 10, nos ayuda mucho fuera de la pista. También me hace ilusión estar con Laia (Flores).

Todo el mundo habla maravillas de Helena Pueyo. ¿Tan buena es?
Es una jugadora con muchísimo talento y que nos va a ayudar mucho. No es lo mismo jugar competición que otra, pero sin duda creo que va a hacer un papel muy importante en el equipo.

¿Qué significa para Helena Oma volver a contar con una pívot como Keisha Gatling?
La gente la quiere mucho, le tienen un gran cariño, pero es algo que ella se ha ganado. Nos sentimos seguras con ella en la pista. No es una pívot que solo fabrique juego para ella, también lo hace para el equipo.

La Copa de la Reina regresará el próximo año a Zaragoza. La última vez que se jugó aquí, no solo se ganó: usted fue la MVP de la final...
Cuando se anunció, volví a recordar muchísimas cosas de esos días. Tenemos ganas de que llegue, sobre todo por lo que significó tener la Copa de la Reina en Zaragoza. Después de la lesión, volver a vivir un momento así sería cerrar el círculo. Pero antes de que todo eso llegue, tenemos retos muy bonitos por delante. Espero que cuando se juegue la Copa pueda estar al 100% recuperada.

Javier Oliván Lázaro
foto: Enrique Cidoncha
heraldo.es