Lee la doble crónica del encuentro
NOS LO LLEVAMOS
Movistar Estudiantes volvía a Movistar Academy Magariños tras el parón de selecciones para enfrentarse a uno de los cocos de la competición, Casademont Zaragoza. Las Women in Black llegaban al completo tras la semana de descanso.
Las Women in Black vestían una nueva piel, pues se jugaba por los afectados por la DANA. Previo al inicio del encuentro, ambos quintetos junto a los árbitros se colocaron para el minuto de silencio en memoria a todas las víctimas en Valencia y alrededores.
Camilión, Salvadores, Ridard, Topuzović y Banaszak saltaron al parqué al comenzar el partido. El primer cuarto fue muy igualado, por parte de las de Movistar Estudiantes, Salvadores, Topuzović y Banaszak sumaban en el marcador; pero conseguían una continua respuesta por parte de las visitantes, bajo el liderazgo de Mariona Ortiz. En los últimos últimos minutos del cuarto, las Women in Black no estaban encontrando el acierto, y las rivales aprovecharon para conseguir una pequeña distancia en el luminoso que anunciaba 19-26 al finalizar.
En los primeros minutos del segundo cuarto, fue el festival del triple protagonizado por Sharp, Camilión y Bühner, anotaron 4 triples seguidos que les permitió empatar el encuentro a falta de 4:45, 39-39. Sin embargo, un par de malos ataques por parte de las locales, volvió a poner a las mañas por delante (41-47), viéndose obligado David Gallego a parar el juego a falta de 2:31; tiempo muerto que funcionó, pues le siguieron un triple de Banaszak y una canasta de la serbia para volver a ponerse a la mínima (46-47). Las Women in Black lograron adelantarse en el marcador a falta de 3 segundos con dos tiros libres de Salvadores, obligando a Cantero a pedir tiempo muerto a falta de décimas de segundos. Finalmente, el resultado al descanso fue de 51-50 a favor de las de negro.
El tercer cuarto fue algo tenso, de poca anotación. Por parte de las de Zaragoza, Mawuli era la única capaz de anotar. En cuanto a las de Movistar Estudiantes, fue una aportación compartida entre Salvadores, Camilión y Banaszak. Pasaron 3 minutos sin que ninguno de los dos equipos lograra sumar puntos. Lo hizo de inicio Zaragoza, seguido de un impresionante parcial de las mujeres de negro en los últimos 50 segundos del cuarto, que incluía un triplazo de Alonso de Armiño en el último segundo, para poner el 68-63 como resultado de final de cuarto.
Las Women in black son imparables en casa cuando están bien acertadas, bien detrás y con la afición animando a TOPE. ¡Qué gran último cuarto! Les dio la victoria por 90-72.
Gran victoria de las women in black para seguir creciendo y consolidar el equipo.
Próximos partidos
Las mujeres de negro viajarán este fin de semana al País Vasco para enfrentarse a Kutxabank Araski el domingo 17 de noviembre a las 12:30 horas. Tras ello volverán a Magariños en dos partidos la próxima semana, el 20 de noviembre a las 20:00h para jugar ante STIHL Iraklis en EuroCup Women y el sábado 23 de noviembre a las 19:30h, contra Perfumerías Avenida.
Los números
654 aficionados pasaron su tarde de jueves en Movistar Academy Magariños.
Movistar Estudiantes (19-32-17-22). Camilión (12), Salvadores (22), Ridard (-), Topuzović (9) y Banaszak (9) -quinteto inicial- Latorre (-), Saravia (2), Alonso de Armiño (8), Sharp (9) y Bühner (19).
Casademont Zaragoza (26-24-13-9) Ortiz (10), Atkinson (9), Mawuli (12), Nystrom (3) y Gatling (10) -quinteto inicial- Flores (6), Mistinova (2), Czukor (-), Brcaninovic (6), Pueyo (12), Urdiain (-) y Hermosa (2).
ESTUDIANTES
MERECIDO REVOLCÓN EN MADRID
Las aragonesas, después de un festival anotador en la primera parte, dejan las peores sensaciones del curso en un partido en el que ni rastro hubo de su defensa y que significa la segunda derrota consecutiva de las de Cantero
Casademont Zaragoza perdió este jueves un partido en el que anotó cincuenta puntos al descanso. Las de Cantero volvieron del parón internacional como se fueron, cayendo derrotadas, en un duelo en el que el festival anotador del primer tiempo dio paso a veinte minutos finales en los que las aragonesas perdieron su identidad, fueron invisibles en defensa y dejaron las peores sensaciones del curso ante un Estudiantes crecido que, todo hay que decirlo, protagonizó una actuación para enmarcar y que le sirvió para obtener un triunfo más que merecido.
El encuentro tuvo un ritmo frenético desde el principio como si fuera un avance de lo que estaba por venir en los primeros veinte minutos. El Casademont encontraba con facilidad buenos tiros bajo canasta mientras las locales se sentían más cómodas desde la larga distancia. El marcador estuvo igualado hasta que entró en acción Helena Pueyo, que propició la primera pequeña ventaja para las de Cantero (14-20). Apareció entonces Brcaninovic con dos triples consecutivos a los que puso remedio, en parte, Gracia Alonso de Armiño. Cinco puntos de la ex del Casademont pusieron el 19-26 al finalizar el primer cuarto.
Si el marcador ya era alto, lo que sucedió a continuación fue casi de no creer. Seguía anotando el Casademont con la misma facilidad con la que recibía puntos. Daba la sensación de que las aragonesas dominaban el partido, pero eso era mucho decir en un partido totalmente loco.
Tanto los tiros fáciles como los difíciles entraban en las dos canastas y, poco a poco, Estudiantes recortaba. En medio del festival anotador, las locales igualaron un duelo en el que el Casademont amenazó con volver a escaparse con triples de Nystrom y Pueyo, pero en el que el Estudiantes, también de dulce desde el triple, liderado por Ángela Salvadores (12 puntos al descanso), comenzó a nublar la noche para las de Cantero. El 51-50 con el que se llegó al paso por vestuarios, unos números más propios de la WNBA, dejaba el partido en el aire.
Sin reacción
Como la lógica indicaba, el acierto disminuyó en la reanudación y eso favoreció a las madrileñas, mucho más intensas durante todo el partido. Eso sí, Salvadores seguía a los suyo en un Casademont que encontraba en la motivación de Mawuli en la vuelta a la que fue su casa su mejor arma. Ese cuarto estuvo marcado por los errores hasta que, con 60-63 en el luminoso, las de Cantero desaparecieron de la cancha.
Un inexplicable parcial de 8-0 en el último minuto del tercer cuarto para Estudiantes fue el preludio del desastre definitivo. El Casademont cogió el AVE dirección Zaragoza cuando todavía faltaba el cuarto decisivo. Ni amago de reacción, ni rasmia ni nada a lo que agarrarse. Las aragonesas contemplaron con parsimonia el recital de las madrileñas, que aumentaron la diferencia sin aparente dificultad hasta lograr endosar 90 puntos a un equipo que si hay algo que le ha hecho poderoso es su defensa. Sin su seña de identidad es mucho más probable que le ocurra lo de este jueves, porque el Casademont ha crecido mucho en poco tiempo, pero todavía no es capaz de ganar solo con el nombre.
Arturo Pola
elperiodicodearagon.com