Lee la doble crónica del encuentro

ESTIRANDO LA MANTA

El equipo salmantino, superior a Celta en cuanto consiguió ajustar su defensa; Fasoula, Carter y Martín marcan el camino (78-62)

El regreso a Würzburg tras el parón de Navidad se presentaba para Perfumerías Avenida como una oportunidad y también un posible bálsamo. La oportunidad de reencontrarse con la afición y a su calor intentar sacar adelante un partido mejorando sensaciones y dejando atrás aquellas derrotas previas a la ventana FIBA y el bálsamo si se conseguía resolver el duelo ante Celta con una solvencia que está siendo difícil de encontrar esta campaña. Al equipo le está costando encontrar sensaciones porque el juego no le llega, ni en lo colectivo y de manera puntual lo hace en lo individual con jugadoras por debajo del nivel que se sabe que tienen pero no demuestran. Oportunidades siguen teniendo todas, porque Montañana está empeñada en que todas acaben por entrar. Volviendo al equipo, dependiendo del encuentro se le ha visto descosido, unas veces por el ataque y otros por la defensa y eso ha costado más de un disgusto y también victorias que no han acabado de ser convicentes. Hay momentos que sí se ha visto el Avenida que se espera y la cuestión que no se acaba de desentrañar es por qué no se consigue dar continuidad a eso.

Un poco resumen de todo ello se vio en un primer cuarto ante Celta en el que el principal problema vino desde la defensa donde se trabaja con ayudas que no funcionan porque no hay retorno a la jugadora que toca y si los primeros tiros del rival encuentran aro ahí decrece la confianza y aumenta la del contrario. Sucedió ante los lanzamientos de Samson y en especial Cooper que hizo daño ante los despistes de Koné, que se fue rápido al banquillo. También en el rebote se concedió al rival y esas segundas opciones permitían a Celta mandar en el marcador pese a los puntos de Carter e Iyana Martín, que con dos triples consecutivos, equilibraba la situación. En todo caso Avenida se iba por debajo en ese primer cuarto y lo que debía preocupar no era tanto el ir perdiendo por tres puntos de diferencia como el haber encajado 26 puntos en ese primer cuarto.

Cambio de cuarto y, como si se entrara en otro partido, mejora defensiva para dejar en tres puntos en más de cinco minutos al Celta mientras en ataque a falta de acierto en el tiro de tres, el regreso de Martín a la pista significó un alivio para surtir de balones a las interiores, primero a Fasoula -por fin dos balones con ventaja para la griega-, y después a Koné. Con esa mejora atrás, recuperaciones y poder correr y un triple de Carter en transición que ponía la máxima para las locales, 40-31 a 2'34" para el descanso.

Muy activa la escolta norteamericana, su actividad al rebote permitía a Avenida remontar en ese apartado estadístico además de aportar nuevas opciones al ataque y Montañana pedía tiempo muerto a medio minuto del final del cuarto para intentar salvaguardar, o en lo posible, aumentar el +10 a su favor. Buen juego entre pívots, que también había aparecido en este parcial, y Koné al tiro libre aunque una falta que también la pitaron a la de Mali en el último segundo dejó las cosas en un 45-35 antes de la bocina.

Parcial de 5-0 en el retorno al juego, puntos que llegaban después de dos buenos movimientos de balón aunque un par de concesiones en el rebote permitían a Celta devolver el golpe. Para revés el que se llevó Guirantes en una pelea bajo su aro que acabó con ella en el banquillo tras el impacto que sufrió alrededor del ojo. Y detrás de ella la que caía era Laura Gil, que se quejaba de una rodilla tras una pelea al rebote con Cooper. Había empezado bien el parcial pero la suma de infortunios hacía perder ritmo al equipo azulón mientras su rival lo aprovechaba para acercarse con los puntos de Tadic. Llegaba oportuno el triple de Vilaró para cortar el parcial en contra.

Como buena noticia Guirantes y Gil volvían de la mano a la pista y el acierto desde el tiro libre de Fasoula devolvía el +10 al equipo salmantino que cerraba el cuarto con un pase por la espalda de Domínguez que, aunque no acabó en canasta, sí se cobró una falta y desde la línea de personal Guirantes situaba el 63-51 para la recta final.

Rescatable del duelo un mayor orden ofensivo y ver a piezas como Fasoula siendo más ella misma. Puntos de la griega y Laura Gil para el 67-52 con el que Cantero pedía tiempo muerto a 7'42" para el final. Protagonistas las dos interiores a las que Silvia Domínguez buscaba. Avenida había conseguido estirar la manta y caminaba cómodo y cobijado hacia el final de partido. Como debe se relajó antes de tiempo y eso le dio a Celta para mejorar su marcador.

MONTAÑANA Y LAS DESCONEXIONES MENTALES

La entrenadora reconoce la necesidad de mejorar en defensa y de lograr que todas las jugadoras mejoren para ser un "rodillo"

VALORACIÓN: Lo primero es dar las gracias a la afición porque han venido a tope a llenar el pabellón. Lo segundo, la victoria. Ha habido momentos mejores de juego, a nivel de ataque hoy hemos jugado más en equipo. Nos diferencia el mantener la intensidad defensiva y debemos seguir mejorando y ajustando cosas. Tenemos un partido en Landes de complicación máxima.

DEBILIDAD DEFENSIVA: Es una desconexión mental de estar ahí, 20 arriba y que nos remonten. Eso es algo que no lo estamos mejorando al nivel que queremos mejorarlo. Cuando juguemos con equipos como Landes va a ser muy duro. Lo hablamos desde hace tiempo pero sigue pasando.

UNIÓN: Hay que estar unidas defensivamente. Todo el mundo quiere anotar, hemos compartido balón, pero al final lo que te va a hacer competir y estar arriba es tener una defensa muy estable durante muchos minutos.

KIKI Y CORNELIUS: Laura el otro día jugó bien contra IDK y hoy no ha estado al mismo nivel, cuando buscamos encadenar partidos buenos individualmente el tener un paso atrás no es bueno para la confianza del equipo ni de la jugadora. Debemos conseguir tener cada vez a más jugadoras para ser más rodillo. Estamos teniendo demasiados altibajos.

Teresa Sánchez & Manel Pacho
tribunasalamanca.com

MEJORÍA INSUFICIENTE

El Celta cae ante el poderoso Perfumerías Avenida en un partido bien competido pero estropeado en el segundo cuarto

No hubo sorpresa ayer en Salamanca, pero por lo menos fue una derrota que no dejó un sabor amargo tal y como sucedió el jueves ante el Valencia Basket en Navia.

Cristina Cantero, entrenadora del equipo céltico, le dejó claro a sus jugadoras tras el partido ante el cuadro valenciano, que si a algo no renunciaba el equipo era a su integridad y estilo. Debió calar el mensaje ya que el Celta Femxa Zorka que vimos ayer en Salamanca fue muy diferente al de hace cuatro días. Evidentemente era un partido poco menos que imposible, pero la imagen de los primeros diez minutos marca el camino que debe seguir en los próximos encuentros.

Fue un primer cuarto francamente bueno por parte de las célticas. Los dos equipos le metieron mucha velocidad al juego, lo que provocó rápidas transiciones, con un buen juego. Fueron los mejores minutos de Samson, que anotó ocho de los dieciséis puntos que anotó al final del encuentro. A su lado, Cooper, que se volvió a atrever desde la línea de triples.

El Celta pasó un momento de bajón mediado el periodo. Las salmantinas hicieron un parcial de 8-0 con un gran acierto de Iyana. Pero esta vez el equipo vigués reaccionó bien, y con las tiples de Cooper y Maxwell le daba la vuelta al marcador, finalizando el cuarto con tres puntos de ventaja.

El segundo cuarto fue una losa para el Celta Femxa Zorka. Al equipo le costaba mantener el nivel del primer cuarto, y esa circunstancia la aprovechó el Perfumerías Avenida para darle la vuelta al marcador en tan solo cuatro minutos, 21-29. A partir de ese momento, el equipo entrenado por Cristina Cantero se bloqueó y las salmantinas consiguieron poco a poco abrir brecha en el marcador hasta fijar en doce puntos su máxima ventaja.

El Celta estaba espeso pero, a pesar de eso, consiguió llegar al final de los primeros veinte minutos de juego con tan solo diez puntos de desventaja.

El Celta Femxa Zorka se recuperó tras el paso por los vestuarios. Las célticas recuperaron la intensidad defensiva y el buen acierto en ataque. Un triple de Samson lanzaba el parcial a un 0-5, lo que obligó a la entrenadora salmantina a solicitar un tiempo muerto.

La remontada comenzaba a tomar forma al ampliar el parcial a un 0-12, y colocarse las viguesas a tres puntos, 52-49. Pero un triple de Vilaró acabó con la racha de las viguesas, que volvieron a verse seis puntos por debajo en el marcador.

El Celta tenía serios problemas para cerrar el rebote defensivo, permitiendo que las salmantinas llegaran a tener hasta dos o tres segundas opciones, y ahí no perdonaban.

Además, las segundas opciones del Celta Femxa Zorka que salían del banquillo no eran capaces de mantener el nivel del cinco inicial. Estaba claro que eran demasiadas ventajas para un rival, que va a pelear por el título de Liga.

En los diez minutos finales del partido no hubo sorpresas. Salamanca conseguía mantener el ritmo de juego gracias a las jugadoras que llegaban desde el banquillo. Las viguesas no perdieron la intensidad, pero la desventaja en el marcador era demasiado importante como para soñar con una remontada que llevara el partido a un final de infarto.

Samson y Tadic mantenían el ritmo anotador del equipo, pero no llegaba para meterse en el encuentro. Por ello, los minutos finales del partido transcurrieron con mucha tranquilidad.

Una vez superada la semana en la que el equipo se enfrentaba a dos de los gallitos de la competición, llega el sábado un partido clave para el equipo vigués. El Celta Femxa Zorka recirá en el pabellón de Navia al Araski. La novedad es el cambio de hora, ya que el partido se jugará a las cinco de la tarde. La victoria supondría conseguir dos triunfos de ventaja sobre el cuadro vasco, que es uno de los rivales en la lucha por conseguir la permanencia.

Raúl Rodríguez
farodevigo.es
foto: Frederick Ortiz