Después de conseguir este hito, Mariona publicó un emotivo y escueto mensaje en su perfil de Instagram, donde recordó que la capital aragonesa se había convertido en su "segunda casa".
Junto al texto, la directora de juego catalana incluyó también una pequeña serie de cuatro fotografías que repasaban su etapa en el Casademont.
En una de ellas, aparecía la pancarta que le dedicó un sector del pabellón Príncipe Felipe en el último encuentro, en la que se podía leer: "Mariona histórica".
Compañeras de vestuario como Ellen Nystrom o Laia Flores, excompañeras como Khayla Pointer, Petra Holesinska o Carmen Grande, respondieron a la publicación de Mariona, así como una gran multitud de aficionados que recordaron a la base el enorme cariño que le dispensan.
"En Zaragoza he encontrado el lugar de paz que necesitaba", afirmó la jugadora en una entrevista con este diario hace ya casi dos años. Entonces, casi nadie era capaz de pronosticar el enorme potencial que aguardaba en sus manos.
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