Un padre de la cantera del Club Baloncesto Conquero ha enviado a esta redacción una carta explicando la mala utilización y gestión que a su entender se está realizando de los diferentes equipos de la cantera del club onubense, apuntando directamente como máximos responsables de ello a la presidenta Rosa Espada, al director deportivo, Gabriel Carrasco y al coordinador de cantera, Salvi Quintero.
Pasamos a publicar la carta que nos ha remitido este padre, salvo en los párrafos en los que se hacen acusaciones o dejan entrever comportamientos incorrectos fuera del ámbito deportivo.
LA CARTA
“Soy un padre de cantera que me gustaría quedarme en el anonimato por decisión propia pero tras meditarlo mucho, he decidido contar a la opinión pública la situación de desamparo y engaño en la que se encuentran los diferentes equipos de cantera del Club Baloncesto Conquero, club que conozco desde hace tiempo y donde entrena mi hija desde hace varios años. La temporada pasada, se anunció en la web del CB Conquero, un fichaje estrella. Salvador Quintero (Salvi) se hacía cargo de la cantera, una cantera que con este fichaje el club pretendía potenciar. El nuevo coordinador llegaba con ganas de trabajar y nuevas ideas, fichar jugadoras de otros clubes onubenses o foráneas, impartir clases de tecnificación entre las jugadoras más sobresalientes, coordinar la participación de algunas jugadoras en dos categorías… etc. Estas ideas se fueron aparcando una tras otra y finalmente abandonando cuando el coordinador, igual que el resto de los entrenadores del CB Conquero, dejaron de cobrar las gratificaciones pactadas con la dirección deportiva y presidencia del club. Según el coordinador mismo manifestaba a quien le quisiera escuchar, no solo no había cobrado lo prometido por Rosa Espada y Gabriel Carrasco, sino que había puesto dinero de su bolsillo en la organización de algunos eventos y competiciones.
Por eso, todos nos sorprendimos cuando esta temporada Salvi volvía al puesto de coordinador de la cantera. Poco después algunos padres comentaron que Gabriel, director deportivo del club y máximo responsable de éste, para retenerlo y poder olvidarse de los muchos quebraderos de cabeza que le suponía la cantera, le había cedido “la gestión integral de la cantera”.
Y ahora yo me pregunto: ¿Qué es lo que ha hecho Salvi en estos apartados?
Se ha desprendido de los equipos que por lo visto no le resultaban rentables, esta temporada hay un solo equipo júnior (en vez de los dos que corresponderían a los dos equipos Cadetes de la pasada temporada) y ningún equipo sénior, lo cual ha cortado de raíz las aspiraciones de la mayor parte de las jugadoras de la cantera a partir de los 18 años de edad. ¿Cómo se explica que la cantera de un club se recorte por el segmento en el cual se supone que tienen que ir surgiendo futuras jugadoras para el primer equipo?, ¿Que futuro tienen las niñas que hoy están en infantil o en cadete, muchas de las cuales están en la cantera desde sus inicios en el baloncesto?
Mucho nos tememos que algunas se buscarán otro equipo (si no lo están haciendo ya), otras abandonarán el baloncesto e incluso dejarán de hacer deporte. ¡Cómo se les llena la boca a Rosa Espada y Gabriel Carrasco hablando de la cantera, si luego no saben explicar qué ocurre con la cantera. ¿Cómo respaldan a un responsable de cantera en cuyo esquema organizativo se prescinde de las jugadoras cuando se supone que deben empezar a dar sus frutos deportivos?
Por otro lado y dado que muchos de los entrenadores de la pasada temporada no quisieron seguir trabajando gratis como pretendía el club, Salvi se buscó a dos colaboradores de confianza (Marta e Iván) con los cuales pensaba llevar adelante varios equipos entre ellos, el equipo estrella (el júnior) y los dos cadetes. Sin embargo estos dos entrenadores también han abandonado el club en estos últimos días cansados de promesas de cobro que nunca se han cumplido. No han cobrado nada de septiembre a diciembre además de lo acumulado de la temporada pasada.
Desconocemos si los gastos federativos del club están al día, pero sí sabemos que los entrenadores no han cobrado nada desde que comenzó la temporada y que las niñas no han recibido las equipaciones, después de haber pasado tres meses desde que las pagaran religiosamente.
¿Que va a pasar con la cantera a partir de ahora? Los padres ya saben que el dinero no llega a los entrenadores, muchos de los entrenadores ya se han ido porque han perdido la esperanza de cobrar sus gratificaciones y ni el club ni el coordinador tienen credibilidad para buscar nuevos entrenadores para su “mimada” cantera”.
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