EUROLIGA FEMENINA. Perfumerías Avenida se despide de Europa tras caer ante Kursk pese a dar la cara hasta el final, 66-72. Ahora toca centrarse en la Liga con actitud y valentía similar que en esta despedida
Tras unos días complicados para todos era evidente que resultaba fundamental una buena salida al partido. Por buena se entiende en que se consiguiera anotar en las primeras acciones para cargarse de golpe cualquier fantasma que asemejara el último partido. Si llegaban puntos se podía dar por sentado que Avenida iba a defender bien pese a tener enfrente a un adversario al que, por la calidad que atesora, se le caen los puntos de las manos de sus jugadoras.
Con un Perfumerías Avenida agresivo hacia la canasta comenzó el encuentro. Puntos que se sumaban desde fuera pero sobre todo por dentro de la mano de Ndour y Gidden, que superaban a sus pares para así conseguir mantener controlada la capacidad anotadora de Kursk.
Tras el inicial cambio de golpes, Avenida cogió una ligera ventaja que tras una canasta de Silvia Domínguez tras una preciosa penetración permitió a las salmantinas irse seis arriba, 16-10, y provocó el tiempo muerto de Gundars Vetra. El técnico ruso puso a Osipova en pista para buscar más dureza en su juego interior y le funcionó para frenar el tirón de las locales que aun así consiguieron aguantar el primer cuarto por encima, 20-17.
Ogwumike, desaparecida hasta ese momento, comenzó a dejarse ver y eso son palabras mayores porque a su alrededor Kursk crece y sus compañeras ganan en confianza así que el partido se volvió pronto a igualar pero Avenida seguía atacando con todo el alma y los puntos llegaban de la mano de Leo, Silvia o Ndour para volver a abrir esa pequeñita brecha, 30-24, que mantenía la esperanza en la grada.
Si de ser valientes se trata, este sí es el Avenida que queremos. Si hay que morir, que sea con las botas puestas.
Cada balón era una pelea para las de casa y eso se traducía en opciones para anotar y para aumentar una ventaja que alcanzaba los diez puntos a cinco del descanso, 34-24. El problema es que ante un rival así en cualquier momento se puede producir el zafarrancho y en visto y no visto, con la mano de la defensora encima, llegaron dos triples de Miyem y Jekabsone para ajustar un poco la situación, 36-30
Lo que le había funcionado a Avenida hasta entonces era minimizar sus errores o pérdidas para evitar que Dynamo corriera y tratar de forzar su fallo con la defensa. Eso exige un ritmo de juego tan alto que se producía la típica goma que a 1’46” para el descanso dejaba la situación en un 38-35.
Miranda solicitó tiempo muerto para intentar atar en lo posible ese tramo final. Con esos tres puntitos de vida se iban las salmantinas al descanso, 40-37, y eso que dentro e un ataque que más o menos había funcionado había faltado el acierto de tres (1 de 8 frente a los 4 de 9 de Kursk). Incluso en rebotes ganaban las rusas, 17 por 20, así que la única forma de seguir en pie era seguir echando el resto
Lo que es Kursk se resume rápido con el inicio del segundo tiempo. Tres primeros ataques, tres triples seguidos de Jekabsone. En un visto y no visto, aunque la respuesta de Avenida fue buena, cinco puntos de Gemelos y dos de Kobryn que sujetaron al equipo en el partido. Lo que quizás no le iba tan bien al equipo, o a ello se supo adaptar Kursk era la defensa zonal puesto que ahora atacaban mucho mejor. Si una jugadora como Jekabsone empieza a ver el aro de una canasta el tamaño de una piscina pasa lo que pasa y llegó su cuarto triple para poner a su equipo por encima 52-55, casi por primera vez en el partido.
Se empezaba a vislumbrar el momento más delicado para las locales porque Kursk, con jugadoras más frescas, apretaba al límite atrás y echaba mano de sus francotiradoras para irse siete arriba con diez minutos por jugar, 53-60. Varias jugadoras de Avenida iban ya al límite físico y se notaba sobre todo en los lanzamientos, que empezaban a quedarse cortos.
Diez abajo se vio el equipo salmantino, e incluso alguno se atrevió a pitar desde la grada pese al tremendo esfuerzo -a veces el público es muy injusto-, pero quien dude de que este plantel tiene orgullo es que no tiene ni idea de su día a día. Gemelos puso al equipo a dos con dos canastones, aunque ahí estaba Ogwumike para avisar de que si se la paga como una de las mejores es porque hay razones y se marcó un triple que frenó el arreón, 62-67.
Y a dos minutos del final , 66-67 en el marcador. ¿Quién no quiere Euroliga? El equipo tuvo balón para ponerse arriba. En la ruleta rusa que supone un momento así no lo pudo aprovechar y en la siguiente acción Harding se echó encima de su defensora y se cobró una falta que le permitió ir al tiro libre. Anotó uno de forma que se entró dos abajo en el último minuto. Ahí no se pudo anotar -le faltó valentía a Kobryn-, y Kursk jugó con la facilidad de los árbitros para señalar personal e ir al tiro libre desde donde Jekabsone no erró y puso cuatro arriba a las suyas, 66-70. Había que atacar rápido y lo hizo Gemelos buscando canasta cerca del aro, arriesgando ante Osipova que con un tapón frustró las opciones y sentenció el duelo
66 PERFUMERÍAS AVENIDA (20+20+13+13): Silvia Domínguez (12), Jacki Gemelos (11), Vanessa Gidden (9), Gabriela Marginean (8), Astou Ndour (16)–cinco inicial-, Leo Rodríguez (4), Ewelyna Kobryn (4), Alana Beard (2)
72 DYNAMO KURSK (17+20+23+12): Endene Miyem (11), Tatiana Vidmer (2), Anete Jekabsone-Zogota (25), Nnemkadi Ogwumike (10), Kseniia Levchenko (0) –cinco inicial-, Frida Eldebrink (2), Lindsay Harding (8), Liudmila Sapova (6), Irina Osipova (8).
Teresa Sánchez
tribunasalamanca.com