El Celta Selmark cumplió ayer en el pabellón de Navia, sumando la segunda victoria consecutiva y colocándose en la clasificación a dos victorias de una de las plazas que permiten disputar la fase de ascenso a la Liga Femenina, habida cuenta que la permanencia ya está solucionada.
El equipo céltico tuvo que dosificar ayer a varias jugadoras debido a su doble jornada deportiva, por la mañana partido oficial en categoría júnior ante el Arxil, con victoria 43-73, y por la tarde encuentro con el primer equipo. El entrenador Carlos Colinas consiguió un equilibrio casi perfecto en esta faceta y solo destacó por encima de las demás Inés Faustino, con treinta minutos.
El partido ante las asturianas no fue excesivamente brillante, y únicamente tuvo emoción durante los primeros minutos de juego, en los que daba la impresión del que el Celta Selmark todavía no estaba metido en el partido y les costaba ajustar las marcas en defensa. A pesar de ello el equipo céltico no tardó mucho tiempo en ponerse con una cómoda ventaja en el marcador. Minata Keita se adueñaba del rebote, atrapó once al final del encuentro, aunque las lagunas defensivas permitían a las asturianas mantenerse en el partido y manejar diferencias que llegaban a rondar los seis puntos.
En los segundos diez minutos de juego la situación fue totalmente diferente. El Celta Selmark consiguió centrarse en defensa consiguiendo que el Universidad de Oviedo tardara cinco minutos en conseguir su primer canasta. Durante este tiempo, Cristina Loureiro, Inés Faustino y María Araújo se encargaron de poner al cuadro céltico con diecisiete puntos de ventaja, con lo que todo estaba poco menos que encarrilado.
Colinas aprovechó la circunstancia para darle minutos a todas las jugadoras, llegando incluso a sentar en el banquillo a Minata Keita, que al final de los cuarenta minutos reglamentarios no llegó a los veintiocho minutos de juego.
Tras el paso por el vestuario, el Celta Selmark volvió a pecar de falta de tensión defensiva, lo que permitió que las asturianas dispusieran de cómodas posiciones de tiro, aunque al final del cuarto solamente pudieron recortar la desventaja en cinco puntos.
En los últimos diez minutos, el conjunto olívico se instaló en una zona que terminó por hundir las aspiraciones asturianas de llegar al final del encuentro con alguna opción. El ajuste en defensa provocó que en los tres primeros minutos del cuarto el Universidad de Oviedo anotara únicamente tres puntos, sentenciando definitivamente el Celta Selmark el partido con doce puntos. A partir de ese momento solamente dejar que pasaran los minutos con la cómoda victoria viguesa.
Raúl Rodríguez
foto: R. grobas
farodevigo.es