El entrenador de la U20 Femenina nos habla de la concentración, de los partidos de preparación y de cómo llega el equipo al Europeo de Hungría. Rubén Burgos hace un análisis certero de un grupo con mucho talento exterior y al que le viene bien “jugar a campo abierto y beneficiarnos de nuestra intensidad defensiva.”

La U20 Femenina comenzó su concentración hace tres semanas en Viveiro (Lugo). Disputó un torneo en el que perdió ante la U23F y ganó a Países Bajos y Hungría. En León y Valladolid disputó un doble duelo con una de las favoritas al título, Francia, con tablas en el resultado final. Ahora llega el Europeo de Hungría, donde España llega con un equipo con mucho talento en el exterior y con interiores dinámicas para jugar a un ritmo alto. El seleccionador, Rubén Burgos, nos hace una valoración de la concentración y nos analiza lo que puede ser la actuación de España en el torneo continental que comienza este viernes.

¿Cómo ha ido la concentración desde los primeros días en Viveiro?
Realmente venía de un trabajo previo en Azuqueca. En esos primeros días lo importante era testear el momento físico de las jugadoras. No habíamos tenido una concentración tan larga en los últimos años por tema del Covid y había que ver los diferentes estados de forma. El primer objetivo era ir equilibrando la condición física de todas y recuperar a alguna jugadora que venía con alguna lesión. Todo esto lo hicimos en unas condiciones óptimas de climatología, hoteles, pabellón…

El Torneo de Lugo fue importante para poner en práctica lo trabajado…
Es imprescindible tener partidos de preparación. La experiencia del año pasado, con una concentración corta y el Torneo Challenger, nos hizo ver que hasta el segundo o tercer día de competición el equipo no supo reconocer situaciones de juego. En los torneos es donde puedes ver las cosas a mejorar, las carencias… y donde las jugadoras adaptan sus roles. También es cierto que también generan contratiempos como pequeñas lesiones, impactos… sobre todo en el caso de Laia Lamana, que la obligó a parar unos días.

Hasta llegar al doble duelo con Francia…
Francia tiene generaciones muy poderosas físicamente. En este caso tienen también talento en el interior. Era un reto a nivel físico; competir contra una selección de un nivel similar a lo que te encontrarás en el Europeo en los momentos importantes. Es verdad que el resultado es lo de menos, y el equipo llegó justo de fuerzas, sobre todo en el segundo partido. El equipo acusó ese máximo nivel defensivo de Francia, pero nos enseña muchas cosas. Aprenderemos de estos partidos y mejoraremos con la experiencia.

¿Cómo es este equipo? ¿Qué características tiene?
El equipo ha hecho suya nuestra propuesta. Los entrenadores tenemos que ajustarnos a las características de las jugadoras y este equipo demanda un ritmo alto de juego. Jugar a campo abierto y beneficiarnos de nuestra intensidad defensiva, con recuperaciones de balón. Tenemos exteriores anotadores, incisivas de cara al aro, con varias tiradoras. Es nuestra fortaleza. En el interior hemos apostado por jugadoras jóvenes y dinámicas que se pueden ajustar a este ritmo alto de juego, sobre todo después de alguna baja importante. Luego habrá variantes para estar preparados en el juego 5x5 o para atacar defensas zonales. Lo difícil ha sido la selección de las 12 jugadoras, porque todas han tenido una entrega máxima, y al final hemos intentado elegir según quienes conformaban el mejor equipo posible.

Hay una mezcla de jugadoras que compiten en España con otras que están en EE.UU ¿se combina bien estas dos realidades?
Lo positivo es que todas ellas han pasado por las selecciones nacionales. Así, teníamos trabajo avanzado. Una concentración larga como esta nos ha permitido no tener un roster de jugadoras con realidades diferentes, sino un equipo. Y creo que lo hemos conseguido.

La U20 es esa categoría de jugadoras de formación que compiten en ligas senior…
Sí, es edad senior, pero la prisa es un error que se comete muy a menudo. Partimos de la base que la formación y la mejora es continua, pero estas jugadoras tienen todavía mucho recorrido. Es cierto que tanto Raquel Romo como yo venimos de trabajar en un equipo de élite europeo, pero hemos contado con la experiencia de Javi Torralba, que su día a día es la formación en Siglo XXI. Ha sido una buena combinación en el equipo técnico, y en la que yo aprendo más de lo que aporto.

Viernes 13:30 primer partido ante Lituania. ¿Cómo esperas que reaccione el equipo en ese momento?
Estamos trabajando en ese partido desde hace tiempo. El staff tiene ya el ‘scouting’, el plan de partido. Pero básicamente es jugar con nuestras señas de identidad, sin miedo y sin dudas para el día de debut. Las lesionadas van a llegar más justas y creciendo en los primeros días, por lo que tenemos margen de mejora durante el campeonato.

Tres partidos con un pequeño margen de error. Y luego, partidos a todo o nada…
La competitividad de este equipo ya la tiene. Es verdad que es un tópico, pero todo pasa por el partido de cuartos. Ese es el día, es el momento de poder pasar a la lucha por las medallas o no. Si todo va por el cauce previsto (que siempre puede haber sorpresas) jugaremos en cuartos de final con uno de los equipos aspirantes a ganar el título. Eso nos responsabiliza, pero también es verdad que nuestro rival estará preocupado de tener a España en el cruce de cuartos. La primera fase nos va a permitir poder tener un rival de menor entidad en los cruces.

¿Te planteas un objetivo concreto?
España siempre tiene que aspirar al máximo. Somos conscientes de que vamos con bajas y con jugadoras jóvenes. Pero merecemos aspirar a una medalla.

FEB